Este mirador se alza en la cuarta planta del hotel. Es un relajante regalo para los sentidos la tranquilidad de la perspectiva de la pescaderia que se vee abajo y los terrados de toda la zona.

La terraza con sus cómodos sofás es ideal para los huéspedes del hotel como para los que no se alojan aquí. Pueden disfrutar de la terraza durante el dìa después un largo paseo en Catania o durante el almanecer. La experiencia al aire libre se convierte además en inolvidable en las puestas de sol.

¡Únicas!